Cuando pienso en México pienso en sus colores, sus artesanías, tejidos, juguetes, lugares maravillosos, su comida tan peculiar capaz de enamorar a cualquier extranjero, en la gente que lo habitamos, en la que inspira y pienso también en las tradiciones que forman parte de todo lo que caracteriza a este bello país.
Estoy convencida que las costumbres y tradiciones han trascendido a lo largo de los años o siglos gracias a las familias.
La familia mexicana para mi es símbolo de unión, de fortaleza y de amor. Para nosotros los mexicanos la familia es lo más importante, es algo que debemos de honrar, de procurar y cuando estamos lejos, duele no tenerlos ahí.
Los abuelos son la pieza clave de que nuestras tradiciones y costumbres continúen, ya que éstas no existirían si ellos no nos hubieran contagiado de ese amor por preservarlas invitándonos a sentarnos cerca de ellos a escuchar todas esas bellas historias.
Las recetas de comida típica han trascendido porque en casa se nos enseña desde niños a prepararlas, a conocer todos y cada uno de los ingredientes, los pasos a seguir y porque algunos platillos aparte de ser deliciosos, están cargados de recuerdos y emociones. Probar un tamal recién hecho, un pozole, un chile en nogada, unas tortillas de harina, un pollo en mole cuando eres adulto puede remontarte a la cocina de tu abuela en donde tu mamá y tus tías los preparaban entre risas, gritos, regaños, "pizcas, puñitos y échale otro poquito" porque no necesitaban ver la receta, ellas ya se la sabían. Ah y preparaban comida en cantidades industriales para dar de comer a todo un batallón porque con cada ciento de tamales seguían viendo poco y su preocupación era que nadie pasara hambre.
Y ¿Qué decir de las leyendas? Éstas han sido contadas por siglos porque son lo que conforman a un pueblo, son parte de su historia y las familias las cuentan como cualquier madre o padre cuenta un cuento a la hora de dormir.
Por todo esto, los mexicanos sabemos que la forma de trascender consiste en que sigamos siendo nombrados por los nuestros aún y cuando ya no estemos.
Que más da si llegamos a ser famosos y la mayoría de los habitantes del mundo reconocen nuestro nombre o nuestro rostro si nuestra familia no habla con orgullo de semejantes logros. La trascendencia de un mexicano se logra por su familia.
Hoy te invito a recordar, honrar a los tuyos y transmitir a tus hijos el amor por su país.
Gaby
* Las imágenes pertenecen a la película Coco de Disney Pixar.
Aquí comparto los latidos de mis amigas Madre Regia y MashaB blog: Nostalgia e inspiración.
Nostalgia mexicana: 11 juguetes típicos| México en 3 latidos | Madre Regia http://madreregia.com/2018/09/14/juguetes-tipicos/
Inspiración: Mujeres Mexicanas | México en 3 latidos | Masha B